sábado, 4 de septiembre de 2010

TWO LOVERS




Agosto ha sido un mes estéril en lo que respecta a escribir en el blog, pero no en lo que a mi relación con el cine se refiere, pues ¡¡he ido tres veces a las salas de proyecciones madrileñas!! Increíble, pero cierto. ¿Cuándo se repetirá semejante maravillosa situación?

Una de las películas que vi fue esta, Two lovers, acertada recomendación de LS. El director es James Gray, un cineasta poco conocido pero interesante, que tiene como actor fetiche al excelente Joaquin Phoenix. Como su propio nombre indica, el tema principal de la historia que se narra (de manera clásica, es decir, "ordenada": con un planteamiento, un nudo y un desenlace) es el amor, o el desamor, más bien, que da más juego. El protagonista acaba de salir de una fuerte depresión motivada por el abandono de su novia, con la que iba a casarse muy enamorado; ahora se encuentra viviendo con sus padres, haciendo recados en la tintorería familiar como si fuera un adolescente. La vida cambia de repente: aparecen dos mujeres, una morena que le promete amor incondicional y estabilidad; y una rubia que se convierte en su pasión.

Todo esto puede parecer convencional. Sin embargo, como diría LS, esta película es antirromántica. El final no es feliz, sin embargo, nos hace ver que el protagonista se reconcilia con el mundo (con su mundo), pero, ¿cómo lo hace? Cualquiera que la viera diría que "se conforma", ¿es así? ¿Elige algo que realmente desea después de darse cuenta de dónde está su verdadera felicidad? ¿O viendo que esta es un imposible acepta la tranquilidad de un día a día previsible?

La grandeza de esa película radica precisamente en el desenlace: la historia de amor deja un sabor agridulce, lo que no es en absoluto convencional. Mientras que aquella otra historia de amor poco habitual como era My blueberry nights acaba como debiera (a saber: bien) con esta la duda está servida: ¿este final deja en paz al espectador.... o más bien le muestra la dureza que encierra algo tan mitificado como el amor?

Os recomiendo vivamente esta historia, y si podéis completarla con La noche es nuestra, la anterior de este cineasta, mejor que mejor. En cuanto a Two lovers, además de Joaquín Phoenix, podéis disfrutar de Isabella Rosellini, Gwineth Paltrow y una menos conocida Vinessa Shaw.
Escuchad de paso Two lovers, canción intepretada por Mary Wells. Saludos a todos.

2 comentarios:

Laura Serrano de Santos dijo...

Hola, Afri:

Soy LS y me sigo hurgando en la costra que me ha dejado esta peli y que llevamos comentando en el verano.

Para empezar, el protagonista está tarado. No es un simple depresivo y, aquí está lo bueno, tampoco es un caso anómalo. Cuando se conoce a la gente en intimidad, hay un montón de comportamientos asociales o patológicos detrás de profesiones socialmente representativas (no como en este caso, chico de tintorería)y esto me hace daño por culpa de una coherencia platónica, que ya sé que hace un par de siglos, al menos, que cayó, pero tengo mis restitos y no me los acabo de sacudir.

Por otra parte,el tema de la honradez con uno mismo y aquí está mi escozor principal: ¿se queda él con la que le quiere por no suicidarse? ¿se conforma y se mentirá íntimamente para toda su vida?¿o tiene una repentina revelación ante el amor de una mujer que le quiere de verdad, que le escoge, y que le salva? ¡Necesito una respuesta!

Y si todo lo anterior lo califiqué de antirromántico siendo de amor, ahora viene la peli-peli imprevisible: el casado forrado y de vuelta de todo, ¡que de verdad deja a su mujer y se queda con la rubia! Este rapto de amor increíble, cuando todos estamos preparados para el tópico del casado, ¿es para mostrarnos que en el amor todo es posible?¿que cabe siempre la esperanza?¿que las rubias que bailan al borde del abismo a veces se salvan?

Y,por último, la madre, Isabella Rosellini, que está honda y maravillosa con ese querer inevitable a un hijo discapacitado al que ve y ve más allá y está dispuesta a dejarle ir y encoger su corazón ante su futuro incierto...¿es feliz esta mujer en su matrimonio?¿con su marido, con su hijo?¿acepta el decurso inevitable de la vida en ese fluir monótono y familiar, pero sabiendo de su lado siniestro? Cuando ve que su hijo vuelve y se queda y anuncia su compromiso,¿ "comprende" la elección del hijo?

Es lo que tiene el Arte, que me impresiona...
¡Gracias por tu blog!

África dijo...

Creo que lo interesante de esta película es precisamente que las preguntas que te planteas quedan sin respuesta. Quizás la historia nos muestra cómo a veces creemos que "esto es lo que va a ocurrir", sin embargo, las personas hacemos gala de nuestro libre albedrío y resultamos imprevisibles.Que las decisiones del protagonista no nos gusten no significa que sean malas decisiones. ¿Realmente es infiel a sí mismo? Al fin y al cabo con su novia anterior quería casarse, tener hijos... Justo lo que puede tener con la chica morena. La rubia... La rubia le deja, es así. Y en cuanto al amante casado de la tal rubia... Sería argumento para otra película saber qué resultaría finalmente de esa relación. En fin, que para entender cómo nuestras decisiones provocan acontecimientos im- o previsibles, recomiendo la algo petulante Las vidas posibles de Mr. Nobody, aunque interesante en este aspecto. Besos, LS.